Una tarea que debes realizar antes de emprender es confeccionar un pequeño plan que describa cómo poder reducir los gastos en tu casa. Y como no, ejecutarlo. De esta forma llegarás con unas buenas condiciones financieras para poder emprender.
Emprender tiene multitud de propiedades positivas. Para mí, la más destacada es que es una de las vías que te podrá llevar a tu libertad laboral y financiera mediante la creación de un sistema que funcione de forma autónoma.
Pero antes de empezar el camino, mi opinión es que debes prepararte para emprender. Para ello unos de los aspectos a tener en cuenta es la preparación financiera previa.
El aspecto que voy a tratar en este post es explicarte cómo reducir gastos en tu hogar. Y me voy a poner como ejemplo de una de mis vivencias. Si también quieres saber cómo ahorrar para poder emprender, lo puedes consultar en esta otra entrada en la que hablo sobre ello.
Antes de crear mi empresa en agosto del 2010, en plena crisis en España, tuve que realizar un plan de reducción de gastos del hogar digamos que drástico. Sabía que emprender llevaba sus riesgos y para minimizarlos, la salud financiera familiar debía ser buena y teníamos que empezar con nuevos hábitos de consumo.
Como ya me irás conociendo, soy muy autodidacta y me encanta invertir en libros sobre temas que me interesen para poderlos releer en cualquier momento. Y uno de ellos es el tema de las finanzas. Te recomiendo dos que van muy relacionados con el tema de hoy: «Ahorra o nunca» de Borja Pascual y «El código del dinero» de Raimon Samsó.
Cómo reducir gastos en casa para emprender
¿Qué hice? Lo primero fue sacar un extracto de las cuentas particulares de todo un año. Me las pase a un excel y dividí los gastos en fijos y variables.
En los fijos puse todos los importes que se repetían en el tiempo de una forma regular:
- Comida
- Agua, luz y gas
- Seguros
- Hipoteca. Para mi esto no es una inversión ni un activo, es un gasto.
- Teléfono/internet
- Colegio
- Suscripciones
- Gasolina
- Otros
En los variables añadí los siguientes conceptos:
- Ocio (restaurantes, cine, viajes…)
- Salidas en efectivo
- Otros
Como inversión tenía un plan de pensiones pero la cantidad que aportaba en aquel momento era poca.
Después analizamos cual debía ser nuestro punto muerto, donde ni ahorrábamos ni perdíamos en función de 3 panoramas diferentes que se podrían producir mientras yo emprendiera . Mi mujer tenía trabajo en la sanidad pero con contratos temporales y en aquella época no sabíamos si tendría continuidad.
- Con ingresos del trabajo de mi mujer y con ingresos míos
- Con ingresos del trabajo de mi mujer y sin ingresos míos
- Sin ingresos de ninguno de los 2. Es decir con el paro de ella y sin ingresos míos del negocio
Obviamente calculamos el punto muerto de la situación más complicada que fue la del tercer punto.
Podría pasar o no, pero debíamos estar preparados para lo que pudiera pasar.
Entonces marcamos unos objetivos de reducción de gastos y vimos, con la hipótesis de la peor situación posible, cuanto tiempo podríamos aguantar.
Me di cuenta que el 40% de los gastos eran variables. Es lo primero en donde metimos mano y cambiamos esas actividades de ocio por otras que no implicaban tanto gasto (salir a correr o en bicicleta, excursiones de un día, comer casi siempre en casa los fines de semana o llevarnos la comida si salíamos, utilizar servicios públicos, no comprar por tener sino comprar por usar …). Conseguimos reducirlos hasta que solo supusiesen un 5% del total de gastos.
En cuanto a los fijos lo que hicimos fue eliminar todo lo que fuera prescindible. Nos dimos de baja de todas la suscripciones, los desplazamientos siempre que podía los hacía en bicicleta o en transporte público, cuando comía fuera de casa por trabajo lo hacía con la fiambrera, llevamos un control de los consumos energéticos de nuestra casa con un objetivo de conseguir reducirlos en un 20%, reducimos la potencia contratada de la luz, el colegio pasamos de un concertado a uno público, …
Si este ejercicio no lo hubiésemos analizado, planificado y realizado, estoy convencido que mi empresa no hubiera tirado hacia adelante. Para emprender es imprescindible que tu situación personal la tengas controlada des de un punto de vista financiero. Lo que no te puede pasar es que por un mal control de tu economía personal luego eso afecte a tu proyecto.
Te lo digo porque en nuestro caso hubo un momento que debido a continuas aportaciones de dinero a la empresa nos quedamos con unos 2000 eur en la cuenta particular. Con esa situación si no hubiésemos hecho la reducción de gastos previa a emprender ahora te estaría explicando otra experiencia y nada agradable que digamos.
Por eso recomiendo encarecidamente que antes de que empecéis a emprender, confeccionéis vuestro propio plan de reducción de gastos y que después, claro está, lo llevéis a la práctica.
Luego si os funcionan las cosas ya podréis permitiros más libertades económicas pero en los inicios toda prevención es poca.
No os arrepentiréis. El sacrificio inicial si luego os va bien vale mucho la pena y la empresa os devolverá y multiplicará todo el esfuerzo realizado.
¿Te gustan mis contenidos? Si es así puedes suscribirte gratis a mi blog poniendo tu nombre y correo electrónico. Recibirás por mail una vez a la semana todo lo nuevo que vaya publicando (posts, videos, podcasts) y otros exclusivos protegidos con contraseña solo para suscriptores. Además, y a modo de bienvenida podrás acceder a estos 3 artículos especiales:
Lectura recomendada en el post de hoy:
Deja un comentario